07.05.23

Jamás te culparía de nada pues conozco mi responsabilidad dentro de esta situación, lo cierto es que ha habido momentos extremadamente felices pero otros no lo han sido tanto y reconozco que esa proporción  había sido lo que me mantenía ahí queriendo intentar un poco más pues desde hacía varios meses había decidido arriesgar y entregar todo de mi para que funcionara y por momomentos pensé que era justo dar un poco más pues quien no había entendido la dinamica de la relación en un inicio era yo y por tanto había fallado, sin embargo el aceptar dichos terminos, el tener que ser yo quien se esforzara, quien buscara, quien entregara sin obtener muestras aparentes de "amor" pronto comenzaba a pesar y a colocarme en situaciones incomodas en las que me sentía una mentirosa para con los demás cosa que jamás me había permitido en ninguna situacion de mi vida , alguien que debía mendigar amor, que debía estar ahí detrás esperando un abrazo, un beso o hasta un te quiero... situaciones que escasas veces ocurrieron y aunque para ser sincera en terminos materiales jamás hubo un desacuerdo y hasta en cierto punto creo que buscabas "compensar" la situación emocional, la realidad era que la inseguridad, la falta de atención y cariño ya me pesaban muchísimo y por momentos me causaban temas de ansiedad y tristeza pues no entendía cuanto más debía de esperar para tener una "relación estable"... no sabía que la realidad sólo estaba prolongando el inminente final. 

Había momentos en los que sentía que estaba dejando de ser yo misma, en las que me preocupaba más por tus necesidades que por las mías, en las que descuidaba lo que en cierto momento habían sido mis tan anheladas prioridades y sueños sólo para ajustarme a tus horarios, tiempos y demás, ya no me sentía comoda de poder hablar de cualquier tema contigo y mucho menos de intentar incluirte en mis planes por que sabía que no contaría con ello... y tantas  veces me preguntaba ¿Ese es el tipo de relación que quiero?, Pero algo pasaba en mi, simplemente no podía soltar y en verdad se estaba volviendo sumamente agotador te adoraba, pero en ese inmenso amor que sentía por ti me estaba perdiendo a mi misma y eso no me lo podía permitir. 

ATAISA 

25.11.22

 Me pregunto si en algún extraño momento dejaré de llevar el estilo tan aprensivo de vida que llevo, lo he estado analizando, ¿por qué no simplemente puedo parar? Probablemente si sea una enfermedad mental, después de aquel extraño suceso con el conductor de aquel taxi me detuve a analizarlo con más detalle, ¿será que en verdad mi futuro podría convertirse en un martirio si no le pongo fin a esto? ¿Pero qué es esto? No considero que sea algo precisamente malo sin embargo he de aceptar que muchas veces me coloco a mi misma en situaciones desagradables de muchísima presión, presión ejercida por mi misma, no lo sé, aún cuando muchas veces me causo ciertos malestares fisiológicos, otras veces la satisfacción es grande y ello se siente bien. A pesar de que me gusta vivir así hay veces en las que sin duda preferiría dejar de ser de esta manera… no lo sé tocará esperar a que todo pase y quizá mi perspectiva de vida cambie, por ahora creo que me siento tranquila, las diez mil cosas en la cabeza se están resolviendo una a una y no pienso dejarlas inconclusas. 

Respecto al amor… creo que todo lo anterior había sido con la intención de huir de él, hoy es diferente, hoy quiero incluirlo dentro de mi vida, quiero que ese aspecto no quede fuera, quiero encontrar una motivación más, aquello que me haga creer que en verdad puedo y yo poder regresarle lo mismo. 

🌸

22.06.2022

 Y cada vez, en mi cumpleaños, comenzaba la temporada de rompimiento, ¿acaso era mi cumpleaños lo que marcaba el inicio de temporada?, quizá sólo me encantaba llorar al ritmo de la lluvia pues como cada verano las hormonas me traicionaban, pero peor aún, los amores. El amor para mi ha sido un tema complicado, jamás he de entenderlo y jamás entenderé cómo es que debería comportarme, tampoco quiero señalarlos a ellos como los culpables “no son adivinos” para saber exactamente cómo deberían tratarme, probablemente yo he sido la razón principal de esas lágrimas sin embargo, a mis 28 años muy probablemente seguía sin saber qué es lo que quería pero si algo había aprendido es que era aquello que no quería y si aferrarme a encontrar algo más o algo distinto me hacia la culpable, si, seguramente yo lo era. 

Y esta vez quiero dejar en claro que no le odio, no siento resentimiento ni culpa por aquello que cambió y dejamos de sentir, quizá me detesto un poco a mi por hacer el proceso más doloroso, por aferrarme a algo que simplemente ya no podía ser y no iba a regresar, tampoco me arrepiento de nada, desde el inicio sabía que si algo fracasaba sería doloroso sin embargo, ambos afrontamos el riesgo y debo decir que de todo aquello, no cambiaría absolutamente nada pues si le cambiara la historia dejaría de ser única. 

Soy consciente de lo que sucede, de las decisiones que hemos tomado y no queda más que agradecerle a la vida por haberme dado la oportunidad de aprender un poco más, siempre hago énfasis en las capacidades del ser humano como un ser diferente del resto de las especies, sobre todo, énfasis en los derechos que no poseemos por tener capacidades mentales superiores, pero si algo hay que destacar es esa maravillosa capacidad de relacionarnos entre nosotros , que al ser tan compleja muchas veces terminamos equivocándonos. 

ATAISA 

04.06.2021

 Y cada día después de aquel suceso me despertaba pensando: “si él apareciera aquí, si él me buscara y apareciera en mi puerta para decirme que todo había sido un arranque, una confusión, que todo estaba bien” todo habría sido distinto, la historia hubiera sido otra, quizá de repente el orgullo, la tristeza y la decepción  al pensar que la persona que quieres y dice que te quiere falle de cierta manera, me hizo pensar que mi tiempo ahí había terminado, al principio fue sólo una suposición, poco tiempo después, al esperar demasiado, eso se convirtió en una determinación. 

ATAISA 

09.10.22

 Por qué  no aceptar que simplemente ninguno estaba mal? Porqué no aceptar que simplemente no éramos él uno para el otro y eso no funcionó? Era necesario analizar acciones y actitudes de cada uno para determinar quién de los dos había fallado? Era necesario buscar el error, señalar y apuntar quién era el culpable? Cuando el amor se acaba ya no hay más que hacer más que soltar, y entiendo el enojo, entiendo la ira, pues los mecanismos de defensa de nuestra mente suelen ser muchos pero la realidad es que en la vida todo aquello que comienza tiene un fin y hay que vivir consientes de ello, 

ATAISA. 

26.04.2022

 Y te preguntas una y otra vez, si a lo largo de estos años has hecho bien las cosas, era una mañana más en la que el pasado me enredaba con sus dudas, dudas sobre todo de el último año, cuando había decido cambiar mi vida, acabé con aquello que me hacía sentir inestable y encontré algo que era completamente lo contrario aunque no por ser lo contrario significaba ser bueno, pues lo que en su momento parecía ser maravilloso también encontró en el tiempo la manera de transformarse ...

Me queda claro que la vida son cambios, cumplir un ciclo más siempre te hace imaginar cómo sería tu vida si las desiciones hubieran sido otras, ¿en que lugar estarías?, ¿de que personas estarías rodeada?, no lo sé, justo ahora cuando mi vida es un pequeño plan mal ejectudado pensar en el hubiera se vuelve mi hobbie favorito, mis intentos por buscar alternativas que siguen sin darme el camino pasan de ser esperanzas a convertirse en pretextos para no salir de la comodidad en la que me he estancado. 

Hoy amanecí con la idea de querer volver atrás y recomponer aquello que hice mal…

ATAISA

14.02.2022

 Y de pronto noté que algo cambiaba, no sé, quizá eres tú, quizá soy yo. La premura con la que nos dejamos llevar nos estaba pasando la factura, la carrera hacia conseguir algo que debía seguirse con una receta paso por paso terminó por estropear lo que quizá se habría conseguido con éxito, pero no fue así, algo sencillamente ya no estaba encajando, las palabras eran insuficientes y de pronto hasta forzadas, el amor comenzaba a escasear cuando antes surgía a raudales, intentaba descubrir en donde estaba la falla pues mi métodica manera de amar me decía que sólo debía componer aquel engrane que detenía al resto, pero por más que repasaba aquí y allá todo parecía simplemente no avanzar...

ATAISA